El Gobierno presento su segundo blanqueo: “Tus dólares, tu decisión”: con esa consigna fue presentada está profundización del desmantelando de  controles sobre el movimiento del dinero.

A cargo de varios funcionarios del área económica estuvo a cargo la presentación del “Plan de Reparación Histórica de los Ahorros de los Argentinos”. El nuevo esquema busca liberar controles para usar dólares sin declarar y sin castigo fiscal. Especialistas advierten que se trata de un blanqueo encubierto que puede facilitar la evasión y el lavado de dinero.

En concreto el anuncio de Caputo se limitó a la eliminación de controles fiscales, una medida que puede empujar el consumo y que también es un alivio importante para bancos y escribanos. Pero siguen vigentes las sanciones y multas para blanquear, además del pago de impuestos que implica exteriorizar dinero no declarado.

de ahora no se deberán informar ante ARCA las compras personales con tarjeta de crédito, débito ni billetera virtual; ni la compraventa de vehículos usados o viviendas; tampoco el pago de expensas ni consumos relevantes de servicios públicos; los escribanos no deberán informar ninguna actividad notarial; y los bancos no podrán pedir declaraciones juradas de impuestos.

Además, sólo se solicitará información cuando las transferencias o acreditaciones superen los 50 millones para personas físicas y 30 millones para jurídicas. Mismos montos para los saldos bancarios. En el caso de las extracciones en efectivo el tope será de 10 millones.

En el caso de los plazos fijos y tenencias en sociedades de bolsa, el nuevo umbral para la información es 100 millones de pesos para personas físicas y 30 millones para personas jurídicas. Para las compras de consumidor final, el nuevo tope es de 10 millones.

El titular de ARCA, Juan Pazo, también informó que los los ciudadanos podrán adherir al nuevo régimen simplificado de Ganancias y no se requerirá más información sobre consumos y patrimonio. El organismo pondrá el foco en la facturación y los gastos deducibles, no en los consumos personales de consumidores finales ni en la variación patrimonial.