Javier Milei lo había adelantado el día anterior y lo ratificó con fuerza al día siguiente. “Soy cruel con los kukas”, le expresó a un grupo reducido en Puerto Madero durante una cena para recaudar fondos. El duro embate que el presidente lanzó contra Axel Kicillof en el acto de apertura de la campaña bonaerense dejó en claro que se avecina un escenario electoral sin concesiones. Al menos ocho fueron las descalificaciones, muchas con insultos incluidos, que Milei pronunció ante cientos de dirigentes de peso de La Libertad Avanza. Desde el escenario del Congreso bonaerense de LLA, mostró su rol de conductor político y agitador, mientras entregaba munición pesada a los suyos con vistas a las elecciones del 7 de septiembre. Ese día, Milei se enfrentará a su adversario principal, su opuesto, su némesis: el kirchnerismo.

No fue casual la detallada descripción de los padecimientos de millones de bonaerenses que deberán votar también el 26 de octubre, dos veces en menos de dos meses, ni tampoco la elección de Kicillof como blanco central de sus críticas más encendidas. “Tengo que volver a la crítica a la provincia de Buenos Aires,,, o sea, a esto de los 2.5 billones y cómo lo financiamos... Se supone que tengo los papeles para no hacer esto”, admitió en un momento del discurso. Es que el presidente había comenzado a hablar de economía, desviándose del guion que había preparado con la intención clara de polarizar con el gobernador, quien además enfrenta una interna peronista aún sin resolver por el armado de listas.

Además de la frase “Sí, soy cruel, kukas inmundos, soy cruel con ustedes, con los empleados públicos, con los estatistas”, otro dato clave del acto en un salón de eventos de Gonnet, en las afueras de La Plata, fue la información que Milei manejaba: encuestas que lo ubicaban ganando en la provincia, incluso en áreas densamente pobladas de la Primera y la Tercera Sección Electoral. Aunque los sondeos varían tanto como el humor social, hay consenso en que La Libertad Avanza entra a la contienda con chances reales, mientras el voto peronista exhibe apatía y retroceso.

En la Tercera Sección iba a competir Cristina Kirchner, pero la condena a seis años de prisión y la inhabilitación perpetua para cargos públicos la apartaron de la disputa y la confinaron en San José 1111. Los encuestadores aún no arrojan cifras definitivas sobre cómo repercutió, fuera del núcleo duro K, la confirmación de la condena en la causa Vialidad. Algunos creen que incentivó al electorado opositor, otros que profundizó el desencanto. Aunque centró su embestida en Kicillof, Milei también aludió a CFK y sus infortunios: “La del 80 es una generación de dirigentes políticos que vale la pena tomar como ejemplo, y no a la banda de la presidiaria”.

“Experimento es el kirchnerismo, y los resultados están a la vista de todos. Solo han sido positivos para los políticos y sus amigos... Bueno, por eso los estamos mandando presos, van a terminar presos. Que, dicho sea de paso, ocurrió en este Gobierno. El que es verdaderamente republicano deja actuar libremente a la Justicia”, puntualizó.