En el sur de la provincia de Buenos Aires, se encuentra un pequeño paraíso costero poco conocido pero inmensamente encantador: el Balneario Marisol. Este idílico lugar, también conocido como Oriente, es un pequeño pueblo con menos de 200 habitantes, ubicado en el partido de Coronel Dorrego, cerca de Claromecó y Monte Hermoso​​.

Fundado hace 73 años, Marisol comenzó a poblarse de manera estable recién a finales del siglo XX, conservando una atmósfera de calma y serenidad hasta nuestros días​​. La historia de este encantador lugar se remonta a 1948, cuando David Mathov compró las tierras que luego darían vida a la localidad, siendo considerado el fundador del pueblo​​.

La principal atracción de Marisol es su extensa playa, que se extiende por 35 kilómetros de longitud y hasta 800 metros de ancho en ciertas zonas, caracterizada por su tranquilidad y belleza natural. Además, los médanos forestados y la ribera del río Quequén Salado añaden un toque distintivo al paisaje​​.

Para aquellos interesados en explorar más allá de la playa, Marisol ofrece una variedad de atractivos turísticos. En el centro de la localidad, se encuentran acogedoras cafeterías y pequeños comercios, ideales para disfrutar de paseos entre calles arboladas. A pocos kilómetros del pueblo, los visitantes pueden descubrir zonas de pesca deportiva, puentes antiguos, saltos naturales del Río Quequén Salado, y cascadas como Mulpunleufú y Cifuentes, además de la enigmática cueva del Tigre​​.

Alojarse en Marisol es una experiencia cómoda y acogedora, con más de 770 plazas disponibles en cabañas, departamentos, hoteles, casas y hasta un camping municipal. La pasarela de madera en la avenida costanera es un punto de encuentro popular durante el verano​​.

Llegar a Marisol es una aventura en sí misma, con un recorrido que incluye la Ruta Nacional 3, el Camino Provincial 108-08, y la Ruta Provincial 72, concluyendo en el Camino del Oriente que lleva directo al corazón del balneario. Bahía Blanca, la ciudad más cercana, se encuentra a 197 kilómetros​​.