Boca y Fluminense disputarán este sábado la final de la Copa Libertadores 2023. La definición en el Estadio Maracaná, en caso de empate, tendrá 30 minutos de alargue y luego, de mantenerse la paridad, el campeón se definirá en la tanda de penales. 

Sergio Romero fue la gran figura del Xeneize rumbo al último partido del torneo, con dos penales atajados en octavos frente a Nacional, cuartos ante Racing y Palmeiras en semifinales. Del otro lado estará el experimentado Fábio, con una racha negativa de 14 penales sin poder detener ninguno (13 convertidos y uno desviado). 

Incluyendo tiempo regular y definiciones, Romero se quedó con 27 remates (13 en tiempo regular y 14 en tandas) de 105 (un 25,7%), mientras que a Fábio (desde 1999) le patearon un total de 150, de los cuales atajó 35 (23,3 %), 13 fueron desviados y 102 terminaron en gol.

Al dividirlo por estado, el brasileño en tiempo regular paró 25 de 105 (23,8 %), mientras que se quedó con 10 de 45 en una tanda (24,5 %). Además, de las 10 definiciones por penales que disputó, terminó como ganador en 6, mientras que en las 4 restantes su equipo fue derrotado.

Volviendo al arquero misionero, participó en 13 series de penales, de las cuales ganó 8, cinco en Boca, las tres en Libertadores y ante Almagro y Talleres por Copa Argentina y perdió las otras 5. En ese tramo de los partidos contuvo 14 (24,5 %), sobre un total de 57, mientras que 38 fueron convertidos y 5 desviados.