Oscar Ezequiel Ochoa, un oficial de policía de 39 años que también se desempeñaba como técnico de electrodomésticos, fue asesinado este sábado en General Belgrano. Según la autopsia, recibió dos disparos a corta distancia, uno que atravesó su rostro desde el pómulo derecho hasta el izquierdo, y otro que impactó en la base de su cráneo, causándole la muerte.

El fiscal de la causa, Jonatan Roberts, solicitó la detención del presunto agresor, Ernesto Gabriel Bramajo, de 82 años, quien se dio a la fuga pero fue arrestado poco después. Se espera que sea indagado el lunes por el delito de "homicidio agravado por el uso de arma de fuego".

Se cree que Ochoa fue atacado luego de vender un lavarropas defectuoso a Bramajo. Tras una discusión en la casa del octogenario, Ochoa fue expulsado y luego interceptado por Bramajo, quien le disparó a quemarropa desde su vehículo.

El crimen tuvo lugar al mediodía en General Belgrano, y el sospechoso huyó del lugar pero fue capturado por la policía poco después del incidente.

El trágico suceso deja en shock a la comunidad de General Belgrano y pone de manifiesto los peligros que enfrentan aquellos que trabajan en la reparación de electrodomésticos, incluso cuando están en servicio como agentes de la ley.