También, verdad y justicia
"Si hay algo que caracterizó el caso de mi viejo es que sirvió para entender un poco cómo funcionó el circuito represivo en la región. Durante el juicio han habido testimonios que dieron cuenta que esto era una cuestión regional, que no eran hechos aislados. Se buscaban abogados, militantes, trabajadores... no era azaroso todo eso".
Con él coincide Carmelo Vinci. "Decían que venían por los terroristas, por los subversivos, por los comunistas; y en realidad a los primeros que detienen es a los trabajadores de las empresas como Fabi y Loma Negra, que hicieron rodear por camiones militares ante un simple conflicto laboral, y también Losa. No venían por ellos, venían por un modelo de país".
Martín Moreno también definió el fallo del Tribunal como "emblemático". Es que, lo que sucedió en Tandil "pone de manifiesto lo que todos sabíamos hace mucho: la responsabilidad civil que existió para que suceda este último genocidio".
En este sentido, el joven militante desde los 13 años, expuso que lo que sucedió en el juicio por su padre, "sienta un precedente muy importante y habla de la maduración que tenemos como sociedad, la maduración que logra la democracia y que hace que por fin nos animemos de una vez por todas a juzgar a los civiles también porque no sólo fueron militares".
Para Martín, "ya no existe más esa burbuja de impunidad que había hacia los civiles que fueron partícipes en la dictadura, y menos hacia los militares".
Por eso, "a la memoria de la que hablamos siempre, ahora le empezamos a agregar un poco de verdad y de justicia".