Vine a participar de la marcha porque yo tengo autismo. Y necesito que les paguen a mis terapeutas, porque si no les pagan, la terapia va a cerrar y mis amigos de terapia no van a venir más y no los podré ver nunca más. Por favor, páguenles a nuestros terapeutas, sino nunca los voy a ver en mi vida», así se expresó Tiziano,un niño con autismo, mientras participaba hoy en una marcha frente al Congreso, convocada  por un gran número de entidades que brindan tratamiento a personas con discapacidad .

La crisis que atraviesa el sector y moviliza a familias y profesionales, se centra en las demoras de pago a prestadores que trabajan con personas con discapacidad. Estos incluyen psicopedagogos, terapistas ocupacionales, fonoaudiólogos, kinesiólogos y acompañantes terapéuticos. La mayoría de los fondos provienen de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), obras sociales y programas estatales que, según los manifestantes, registran atrasos de varios meses.