Las gestiones para tal efecto fueron realizadas por el Fondo al Niño Quemado (FANQ), que es una organización creada por voluntarios bolivianos que residen en la ciudad de Houston, Texas, Estados Unidos de Norteamérica, quienes se ocupan de trasladar a niños bolivianos quemados desde el año 2000, para que reciban atención en el hospital Shriners para Niños, llegando a favorecer a más de 45 menores hasta la fecha.

Actualmente la organización está presidida por la tarijeña Carola Cortez de Urioste, quien informó que la FANQ tiene la voluntad y motivación para trasladar a los menores afectados al Hospital Shriners para Niños, que brinda una atención de la más alta calidad a los niños con lesiones por quemaduras, con quienes tienen un convenio de cooperación para que niños bolivianos y un familiar sean recibidos para recibir un tratamiento médico y reconstructivo especializados hasta su recuperación total o parcial.

Los fondos que permiten la curación de los niños bolivianos en el Hospital Shriners para Niños son recaudados a través de diversas actividades por los residentes bolivianos, como ser kermeses, eventos de confraternización y pequeñas donaciones. En esta oportunidad, por la gravedad de las quemaduras que tiene el niño Delfor S.V. para que sea trasladado a Galveston junto a su madre, fue necesario conseguir un avión ambulancia, el Learjet XA-CST (Med Jets 303), que fue costeado por los donantes de los Shriners de Tampa, Florida, el mismo que llegó a Tarija este pasado domingo al mediodía.

Delfor S.V. viajará acompañado de su madre a su madre Nilda Valencia, para quienes la FANQ realizó todos los trámites legales que incluye la otorgación de la respectiva visa por motivos de salud a los Estados Unidos.

"El costo del avión para trasladar a Delfor y su mamá es de Sus 70 mil, con nuestras recaudaciones ni en tres años podríamos pagar; gracias a Dios lo pagaron los Shriners de Tampa. ¡Dios hace milagros!", expresó Carola Cortez al respecto.

”FANQ es una organización sin fines de lucro dedicada a ayudar a los niños bolivianos que sufren quemaduras graves. Está conformado por un grupo de voluntarios bolivianos residentes en la ciudad de Houston. Trabajando junto con el apoyo de personas, instituciones y empresas, hacen posible que estos niños reciban el tratamiento que necesitan para sanar y recuperarse", se lee en la página web de la organización.

La presidenta de la FANQ pide la cooperación de los medios de comunicación en Bolivia para que el trabajo voluntario que realiza la organización sea difundido en el país para que una mayor cantidad de niños afectados por quemaduras graves puedan recibir atención médica especializada excepcional. 
"Buscamos brindar apoyo a los niños bolivianos que han sido víctimas de quemaduras graves, nuestro fondo se pone en contacto con los niños y familias bolivianos que han sido víctimas para que puedan viajar a Estados Unidos", detalló Cortez.