Según fuentes de inteligencia de Estados Unidos, Hamás y la Yihad Islámica Palestina llevaron a cabo operaciones estratégicas desde el hospital Al Shifa en Gaza. La evacuación de combatientes y la destrucción de documentos y dispositivos electrónicos se habrían realizado en noviembre, poco antes de la operación terrestre de gran escala por parte de Israel.

Un alto funcionario de inteligencia, que prefirió permanecer en el anonimato, reveló que la evacuación incluyó la reubicación de rehenes a otros lugares. La información se basa en una versión clasificada de la evaluación de inteligencia, enviada al Congreso de EE.UU. y que respalda la versión israelí sobre el uso del hospital con pruebas sustanciales.

A pesar de las críticas internacionales, las Fuerzas Armadas de Israel habían atacado el hospital Al Shifa, generando controversia y calificativos como "baño de sangre" y "zona de muerte" por parte de un equipo humanitario liderado por la Organización Mundial de la Salud. Sin embargo, las evidencias presentadas por Israel no han confirmado la presencia de un centro de mando y control de Hamás en el hospital, según informó The Washington Post a finales de diciembre.

Este nuevo desarrollo plantea interrogantes sobre la complejidad y la controversia en el conflicto entre Israel y los grupos palestinos, así como sobre la utilización de instalaciones médicas con fines estratégicos. La situación sigue generando debate tanto a nivel nacional como internacional.