María Eugenia Arias, una supervisora de McDonald's con una carrera de 34 años en la compañía, llevaba una vida de trabajo y estudio que la llevó a convertirse en consultora de operaciones para la zona oeste del AMBA en Arcos Dorados, la concesionaria de McDonald's en Argentina. Sin embargo, su vida cambió trágicamente debido a la inseguridad.

El fatídico día, María iba con su hija de regreso a casa después de un compromiso personal cuando, en la esquina de San Nicolás y Salcedo, en Castelar Norte, partido de Morón, cuatro delincuentes a bordo de un Peugeot interceptaron la Surán que ella manejaba. María intentó entregarles su auto, pero debido a un problema con el cinturón de seguridad, la demora aparentemente impacientó a los asaltantes, quienes abrieron fuego y la mataron.

Este caso guarda notables similitudes con el asesinato de Umma, una niña de 9 años, quien fue asesinada por cuatro delincuentes que interceptaron el auto de sus padres, ambos policías federales, en un intento de robo. Los delincuentes dispararon por detrás mientras Umma intentaba escapar.

Ambos casos involucran a cuatro implicados y resultaron en asesinatos aparentemente irracionales e innecesarios. Ambos han conmocionado a la sociedad argentina y han generado una reflexión sobre la inseguridad en el país.

La empresa Arcos Dorados expresó su profundo dolor por la pérdida de María Eugenia Arias y compartió su solidaridad con la familia de la víctima.

María Eugenia Arias, técnica superior en Administración de Empresas, dedicó gran parte de su vida a trabajar en McDonald's y desempeñaba un papel importante en la supervisión de varios locales en la zona oeste. Su trágica muerte ha generado conmoción en la comunidad y ha destacado la necesidad de abordar la creciente inseguridad en la sociedad.