Este lunes el gobierno formalizó un nuevo crédito por  u$s1.500 millones, otorgado por el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), una de las instituciones que integran el Grupo Banco Mundial. 

El acuerdo con el BIRF fue evaluado favorablemente por la Oficina Nacional de Crédito Público, que destacó el bajo costo financiero del crédito frente a otras alternativas de financiamiento externo. Asimismo, el Banco Central de la República Argentina estimó que el impacto sobre la balanza de pagos será limitado y consistente con las proyecciones macroeconómicas actuales.

Para el otorgamiento de este nuevo crédito que, incrementa el volumen de la deuda externa del estado, el Banco Mundial exigió el cumplimiento de una matriz de acciones previas vinculadas al ordenamiento macroeconómico y a la implementación de políticas estructurales. El mantenimiento de una política económica adecuada será, además, condición esencial para liberar los recursos.