Presentes en los bolsillos de los argentinos desde 1992, la salida de circulación de los billetes de 5 pesos ejemplifica la pérdida de poder adquisitivo de la moneda local, como producto de tantos años de inflación.

Veamos para qué servía un billete de $5 cuando salió por primera vez a la calle, hace 28 años, según el último informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) sobre el Índice de Precios al Consumidor (IPC),

  Con un fillete de $5 pesos se podía comprar:

5,2 kilos de pan

                                                                         9 kilos de azúcar

Hoy con un billete de $5 podríamos comprar:

36,41 gramos de carne picada

13,12 gramos de jamón cocido

14,84 gramos de queso cremoso

185,32 gramos de zapallo anco

89,54 gramos de manzana deliciosa.

50 gramos de pan

110 gramos de azúcar

Aclaremos que estas son una y solo una, no todas juntas.

Así, el papel de 10 con la cara de Manuel Belgrano pasará a ser el de menor poder adquisitivo.

Además, cuando el próximo 1 de marzo deje de existir este billete, la imagen del general José de San Martín volverá a estar ausente después de 78 años de presencia ininterrumpida en los sucesivos signos monetarios argentinos.