En una jornada marcada por la tensión, la Policía arrestó a 29 personas y aprehendió a otras 12 durante una marcha de gremiales que descendió desde El Alto hacia La Paz, en la que, según el director departamental de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), coronel Walter Neme, seguidores de Evo Morales se infiltraron para generar violencia.

Entre los aprehendidos se encontraron cachorros de dinamita, mechas, petardos de alta potencia y guías para detonar explosivos, lo que activó una intervención policial para controlar la protesta. Según Neme, la mayoría de las personas detenidas provienen del trópico de Cochabamba, una región vinculada al liderazgo de Morales.

“Las personas aprehendidas están siendo investigadas por los delitos de instigación pública a delinquir y tenencia, porte y portación de armas y explosivos”, informó el coronel Neme.

Protesta y enfrentamientos

La marcha, organizada inicialmente por gremiales de El Alto, incluyó a seguidores de Morales que llegaron a La Paz el lunes con la intención de tomar la plaza Murillo. Alegaron que su protesta respondía a la situación económica del país, aunque las acciones violentas y el hallazgo de explosivos generaron un fuerte rechazo.

La intervención policial busca evitar la escalada de violencia en un contexto donde las movilizaciones han adquirido un tono cada vez más crítico hacia la gestión del gobierno. Las autoridades han reiterado su compromiso de garantizar el orden público y sancionar cualquier acto que ponga en riesgo la seguridad ciudadana.

Este incidente subraya la necesidad de mantener el diálogo y el respeto a las leyes en un momento de alta sensibilidad política y social en Bolivia.