Un reportaje emitido por el programa “Domingo Espectacular” de la cadena brasileña Record TV mostró imágenes inéditas del lugar donde actualmente reside el expresidente Evo Morales, en la localidad de Lauca Ñ, en el trópico de Cochabamba. Según la cobertura, Morales se encuentra resguardado por un sistema de seguridad civil altamente organizado, compuesto por militantes cocaleros que impiden el acceso a personas externas sin previa autorización.

El periodista Fábio Menegatti y su equipo lograron ingresar al sitio luego de atravesar varios puntos de control. En el lugar, se observó a hombres y mujeres formando anillos de vigilancia con palos, lanzas y escudos improvisados. Los miembros de esta estructura, que se autodenominan “Estado Mayor del Pueblo”, afirman tener la misión de proteger al líder del MAS, a quien consideran un perseguido político.

Durante la entrevista, realizada en una oficina que contrasta con el entorno rural del lugar, Morales negó las acusaciones de trata de personas en su contra, calificándolas como parte de una campaña para proscribirlo políticamente. Cabe recordar que el exmandatario enfrenta una orden de aprehensión por ese caso, que involucra a una presunta víctima menor de edad, y cuyo proceso judicial continúa abierto.

Morales también se refirió a la coyuntura electoral, lamentando la pérdida de la personería del FPV y denunciando que se lo ha inhabilitado de forma ilegal para participar en las elecciones del 17 de agosto. Aseguró que, pese a las restricciones, mantiene la esperanza de “volver a salvar al país desde lo económico”.

Asimismo, mencionó su relación con el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, a quien calificó de “humanista” y con quien dijo compartir una visión regional progresista.

El reportaje generó repercusión internacional y refleja el clima de tensión política en torno a la figura de Evo Morales, su futuro electoral y el impacto de los procesos judiciales en curso. Mientras tanto, el exmandatario continúa operando políticamente desde su bastión en el Chapare, rodeado de férrea custodia y con la expectativa de retomar un rol activo en la política nacional.