El automovilismo argentino se encuentra en un punto de inflexión ante las recientes medidas anunciadas por el presidente Javier Milei. Con un enfoque en la reducción drástica de los subsidios estatales, el Turismo Carretera, uno de los deportes más emblemáticos de Argentina, podría enfrentar cambios significativos en su estructura de financiación y transmisión.

Desde 2013, la Asociación de Corredores de Turismo Carretera (ACTC) ha recibido fondos gubernamentales que le han permitido gozar de ciertas ventajas en el mercado del automovilismo nacional. Estos subsidios han sido fundamentales para mantener la competitividad de la ACTC frente a otras productoras y categorías de carreras​​.

Sin embargo, la llegada de Milei al poder conlleva una política de ajuste fiscal que incluye la privatización de la TV Pública, lo que significaría una revisión completa de los modelos de financiamiento y transmisión para el Turismo Carretera. Este cambio podría terminar con los privilegios que la ACTC ha disfrutado en los últimos años, nivelando el campo de juego con otras productoras como Carburando​​​​.

Además, se ha cuestionado el modelo de negocios de la ACTC, que incluye la venta de fechas de carreras a gobiernos provinciales y la creación de su propia plataforma de streaming, Motorplay. Esta plataforma ha permitido a la ACTC transmitir su contenido sin la intervención de canales de televisión, una ventaja no compartida por sus competidores​​.

La situación se complica aún más con la decisión de Milei de poner fin a los subsidios estatales. Esto no solo afectaría la transmisión de las carreras, sino también el modelo de negocios de la ACTC, que se ha beneficiado de estos fondos para desarrollar su estructura y obtener ventajas competitivas​​.