El docente-investigador en comunicación digital, Maximiliano Perèt, considera que Twitter y Facebook son las redes sociales más utilizadas en la política, pero tienen perfiles diferenciados. "En mi opinión, Twitter es la más interesante para trabajar, por la forma de llegar: la persona que te lee es la que decide seguirte, el mensaje es más direccional y es un desafío interesante adaptar un discurso a otra forma de escribir", dice, en referencia a la limitación de 140 caracteres que integran un tuit. Por otro lado, "Facebook es una red social que da para todo. Si bien años atrás era exclusivamente para jóvenes, ha cambiado mucho y lo usan personas de diferentes edades", considera el licenciado en Comunicación Social, miembro del grupo Mediaciones Tecnológicas y Comunicación Digital (MTyCD) de la Facultad de Ciencias Sociales. Y asegura que la red social de fotos, Instagram, tendrá un lugar más interesante en el futuro.

Una de las primeras figuras políticas en usar este tipo de plataformas con fines electorales fue el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, en la campaña presidencial del año 2008. Quien resultó electo en esa oportunidad, creó perfiles en MySpace, LinkedIn, YouTube, Flickr, Facebook y Twitter como parte de una estrategia de comunicación, y fue el primero en destinar recursos y personal a administrarlos. Es decir, implementó el Community Management, que una persona o un grupo sea encargada de gestionar y moderar las cuentas públicas de los políticos.

El intendente y candidato por el Frente para la Victoria, José Eseverri, ha admitido que una persona administra en ocasiones su cuenta de Twitter, con casi 7 mil seguidores. En plena carrera electoral, sus perfiles en la red del pajarito y su cuenta de Facebook están 100% dirigidos a la campaña. Fotos, anuncios, inauguraciones y eventos son las principales publicaciones. En este sentido, Perèt sostiene que "el FpV está más sistematizado, tiene mucha estrategia porque se replican en múltiples perfiles de otros usuarios".

En un trabajo de investigación que MTyCD realizó en las PASO de 2013, se reveló un cambio en los perfiles de los usuarios, sobre todo en Facebook, que comenzó siendo la red preferida por los más jóvenes, que por el creciente uso de padres y abuelos, se han ido alejando hacia otras plataformas. "Este ''envejecimiento'' en el perfil del usuario activo de Facebook ha influido en que los contenidos que se comparten estén mutando y, de hecho, hoy se discute mucho más de política y se presentan contenidos más comprometidos con cuestiones sociales que las que poblaban la red en sus inicios", dice el trabajo titulado "La política móvil. El uso de Twitter y aplicaciones móviles en campañas políticas". 

Ezequiel Galli, candidato del PRO, también tiene un aparato de comunicación destinada a la campaña electoral. En Facebook sólo tiene una fan page con más de 10 mil "Me Gusta", donde promociona sus actividades de campaña, encuentros y, al igual que en su perfil de Twitter, replica mensajes, videos y publicaciones de referentes nacionales y provinciales del espacio político.

De acuerdo al licenciado en Comunicación Social y publicista, Claudio Antista, "usar las redes como medio de difusión es usarlas como medio de comunicación entre dirigentes y ciudadanos, sin intermediaciones ni interpretaciones de terceros. Es una herramienta directa, horizontal y poderosísima para comunicar, sobre todo en un electorado que en su amplia mayoría tiene menos de 40 años y para el cual las redes son una suerte de hábitat natural", asegura.

Como usuaria de Facebook, Liliana Schwindt, candidata del Frente Renovador, tiene página personal y fan page. La primera tiene un perfil más íntimo y familiar, mientras que la segunda está exclusivamente dedicada a su tarea como diputada y aspirante a la intendencia. En Twitter combina ambos aspectos, el personal y el público, ante alrededor de 2 mil seguidores.

Los usos de las redes en la política local son tan diversificados como los candidatos. Carlos Gil, del Frente de Izquierda, se hizo una cuenta de Twitter, tras una intervención que llegó a esta red social antes que él: fue previo a las PASO, cuando el aquel entonces pre-candidato por el FpV, Gonzalo Bagú, anunció que se bajaba de las elecciones tras la decisión de Florencio Randazzo de no competir por la candidatura a presidente. En ese momento, Gil se tomó fotos convocando a Bagú al espacio de izquierda y las subió a Facebook, lo que causó una réplica que llegó a la red de microblogging y también a algunos medios de comunicación locales.

En este sentido, Antista dice que, "al principio, en las redes se compartían noticias de los medios tradicionales. Hoy los medios tradicionales son los que generan noticias utilizando las redes como fuente y como aún tienen un poder simbólico muy grande, validan lo que aparece en las redes, alimentan a los medios tradicionales; por lo tanto las redes son influyentes". En Twitter, Carlos Gil publica notas y actividades de militantes provinciales y nacionales, al igual que en Facebook, donde además de mostrar un activismo político, también expone opiniones, fotos y actividades de su entorno familiar.

Con todo, el licenciado Maximiliano Perèt, considera que Twitter es un micromundo donde estamos los que tuiteamos: "Está lejos de tener la cantidad de usuarios de Facebook, pero lo interesante es que en ese micromundo están los medios y lo usan como insumo para publicaciones", coincide con Antista, y agrega que el uso promocionado, pago, de estas plataformas, refleja una forma de pensar que de la mano de estas tecnologías están allanando el camino.

También para Antista, "Instagram es una red que crece muchísimo, que ya empieza a desplazar a Twitter, combinando textos cortos con imágenes. Y hay que estar muy atentos a Periscope, la red que brinda streaming de video en tiempo real desde el celular, la cual va a alimentar mucho a los canales de TV. Seguramente en la próxima campaña, los candidatos muestren sus mensajes, spots o actos de gestión en tiempo real a través de esta red", señala. ¿Política en red? Esto recién empieza.