La campaña de soja en la zona núcleo finalizó. La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) indicó que en esta cosecha se llegó a 18 millones de toneladas. La soja alcanzó esta producción gracias a los buenos rendimientos, porque la superficie de siembra fue menor. Se implantaron 450.000 hectáreas menos que en otros años.

Sin embargo, los buenos rendimientos permitieron compensar la caída. La entidad rosarina explicó que el rendimiento promedio fue de 40,5 qq/ha. El informe destacó que la superficie total con oleaginosa en la zona núcleo fue de 4,56 millones de hectáreas. Es menor a lo estimado antes de la campaña, pero aun así es un resultado positivo.

Finaliza la campaña de soja con buenos resultados y 18 millones de toneladas

Los campos con soja fueron más que otros años en el centro y sur de Santa Fe. Los incrementos alcanzaron el 15%. “En el resto de las áreas, se sembró menos soja que el año anterior. En total, hubo una leve disminución respecto al año pasado, con una reducción de poco menos de 50.000 hectáreas”, informó la BCR.

A pesar de la superficie, el rendimiento promedio es muy bueno. “La mejora de rinde compensa la pérdida de área sembrada y la soja alcanza una producción de 17,94 millones de toneladas en el ciclo 2023/24. Esto es tan solo 300.000 toneladas por debajo del promedio de los últimos 15 años (cálculo que no tiene en cuenta la producción del año pasado)”, explicó la BCR.

Desafíos y complicaciones de la campaña

Esta campaña de soja fue muy buena en comparación con la anterior, pero también hubo complicaciones. “Estuvo atravesada por la problemática de excesos de lluvias. En el mes de marzo, la región núcleo acumuló más de 300 milímetros en el este de la región. Esto produjo severos problemas de calidad en las zonas más afectadas, como infección de hongos como Cercospora y pérdida de rinde en las zonas que recibieron más de 300 a 350 mm”, señaló el informe.

El freno de las lluvias en mayo permitió terminar la cosecha, pero con un atraso de casi 30 días respecto al promedio de las últimas 5 campañas. A pesar de estos desafíos, los buenos rendimientos permitieron alcanzar una producción destacada, compensando la menor superficie sembrada.