El argumento conmovedor y victimizante utilizado por Juliana "Furia" Scaglione en Gran Hermano ha sido desacreditado en las últimas horas, generando un gran revuelo entre los seguidores del programa y causando bajas masivas en el apoyo hacia la concursante, conocidos como la "Furioneta".

Desde su ingreso al reality, Scaglione afirmó haber experimentado duras condiciones de vida, incluyendo momentos de escasez alimentaria y la necesidad imperiosa de ganar el premio para asegurar un futuro estable. Sin embargo, estas afirmaciones han sido puestas en tela de juicio tras la intervención de su hermana mayor, Andrea Scaglione, en el programa Intrusos.

Durante su participación en el programa de televisión, Andrea reveló detalles sobre la verdadera situación económica familiar, contradiciendo el relato de Juliana. "Todos tienen una casa y todos la alquilaron", declaró Andrea, sugiriendo que Juliana también posee propiedades a su nombre, heredadas de sus padres.

Estas revelaciones han decepcionado a muchos seguidores de Juliana "Furia" Scaglione, quienes expresaron su sentir a través de las redes sociales. Comentarios como "Fui engañada" y "No es fácil pasar hambre en tres casas diferentes" inundaron las plataformas digitales, evidenciando el impacto de esta revelación en la percepción de la concursante.

La presencia de Andrea Scaglione en Intrusos también arrojó luz sobre conflictos familiares relacionados con la herencia, señalando a "Coy" como protagonista de disputas por la distribución de los bienes. Estas declaraciones han generado aún más controversia en torno a la situación de Juliana "Furia" Scaglione dentro y fuera de la casa de Gran Hermano.

Con esta polémica, la credibilidad de Juliana "Furia" Scaglione ha quedado cuestionada, y se espera que esta situación influya en el desarrollo del juego y en las relaciones dentro de la casa. La "Furioneta" atraviesa un momento de incertidumbre y descontento ante la revelación de esta gran mentira.