Adolfo Rodríguez Saá: "Hay que empezar un camino virtuoso"
La producción, la vivienda y las exportaciones fueron sus principales ejes que presentó en la recorrida de campaña pensando en las PASO del 9 de agosto. Aseguró que en el país hay 11 millones de pobres y que "si toda la Argentina hubiese procedido como nosotros en San Luis, no habría déficit habitacional".
En dicha entrevista, estuvo acompañado por el precandidato a gobernador Eduardo D’Onofrio y Antonio Miori, primer precandidato a diputado provincial bonaerense.
Sobre nuestra ciudad, Rodríguez Saá indicó que "es una ciudad pujante, un prototipo de ciudad en la Provincia y en el país, que estaban llenas de aspiraciones y sueños. Todas las familias trabajaban soñando en que sus hijos fueran ingenieros, médicos, y el progreso. Y en alguna medida, muchas de ellas han perdido esa ilusión. Tenemos que recuperarlo".
-Siempre hizo énfasis en la provincia de San Luis como ejemplo para poder cambiar el país, ¿qué podría destacar en este punto? Muchos dicen que "parece otro país"...
-Hay que considerar que no solamente es hacer una obra pública, es un modelo de gestión. Logramos manejar las partidas presupuestarias de tal forma que el presupuesto provincial se dedica el 50% para los gastos de sueldo y el otro 50% para obras de infraestructura. Si hay que hacer un hospital, hay plata para hacerlo. Si hay que hacer un camino, hay plata. Es todo un esfuerzo. Lo que tenemos que preguntarnos es ¿y por qué la provincia de Buenos Aires no lo hace así? Porque malgastan la plata. ¿Por qué no en Córdoba o Mendoza? Porque malgastan los fondos. Y ni siquiera malgastan. Tienen gastos innecesarios, superfluos o dedicados a otras cosas que no corresponde, y no a lo específico que hay que hacer.
-Uno de los grandes logros que se le adjudica es la construcción de autovías...
-San Luis ha construido, desde el año 2000 hasta la fecha, 887 kilómetros de autopista. El gobernador Daniel Scioli acaba de anunciar que ha batido los récords en 40 años en su provincia, y ha construido 140 kilómetros. Si yo fuera presidente, uno de los primeros objetivos para hacer es una autopista que una Bahía Blanca con Buenos Aires. Y que una todos estos puntos de la Provincia que tienen una riqueza no solamente humana, sino una riqueza productiva extraordinaria.
Cuando goberné San Luis era muy pobre. Fortalezas tenía pocas. Debilidades tenía muchas. No teníamos petróleo, ni minerales, pocas tierras fértiles. ¿Tenemos agua? Escasa. ¿Cómo en esta situación podíamos salir de la pobreza, del atraso, de la falta de protagonismo? Iniciamos un proceso de industrialización. Empezamos a poner en marcha las fábricas y a generar trabajo. Los puntanos aprendieron que trabajando y capacitándose podían ascender, tener mejores sueldos. Empezamos a generar un círculo virtuoso de credibilidad. Empezamos a construir viviendas, caminos, hospitales y escuelas. Y llenamos de progreso San Luis. Hay que empezar un camino virtuoso.
-En últimas declaraciones se mostró muy enfocado en viviendas y el problema habitacional nacional. ¿Cómo encararía esa temática?
-Primero: la Argentina tiene 11 millones de pobres. No es un número, son seres humanos. Chicos que esta mañana no tomaron el desayuno. Ancianos que tal vez, muchos de ellos, dormirán sin techo, sin frazada ni un plato de comida. Tenemos que pensar cómo sacamos a esos 11 millones de la pobreza. Está claro que tampoco tienen casa, ni tienen vivienda, y hay muchísimas personas, familias de clase media, incluso alta, que no tienen casa. La Argentina tiene un fondo que se llama Fonavi (Fondo Nacional de la Vivienda). Con ese fondo en San Luis construimos 60.000 viviendas que era todo el déficit habitacional en San Luis. Si allí lo hicimos, y con el 1% del presupuesto de Fonavi construimos 60.000 viviendas, si multiplican, 60 por 6 y son 6 millones, da la cantidad de viviendas que faltan en el país. Si toda la Argentina hubiese procedido como nosotros, no habría déficit habitacional. Por año, propongo construir 500.000 viviendas. Esto produce 1 millón de empleos. Más la movilización enorme que produce la construcción. El cemento, ladrillos, puertas, ventanas, pisos. Terminan moviendo a más trabajadores y fomentando el comercio. Entonces, sacamos de la desocupación a 1 millón de personas. Y el número de 11 millones de pobres se va reduciendo. Ahí comienza a construirse el círculo productivo. Promovemos la industria y volvemos a poner en marcha el aparato productivo. Si convocamos al campo, les decimos que vamos a respetar su trabajo, vamos a abrir las exportaciones, que crean en la Argentina, que hagan buenos negocios. A que lleven a sus hijos a que trabajen en los granos, la carne, la leche. Y ayudarlos a industrializar sus productos.
-¿Y el Estado?
-El Estado sólo tiene que poner las condiciones para que esto se haga. Quitarle la mano de encima, ¿para qué sirven retenciones que no se pueden cobrar porque no se exporta? Vengo de San Juan donde me informan que un 30% de la uva quedó en los parrales porque no se cosecharon. Entonces me pregunto: ¿por qué la insensatez? Si cosechamos esa uva y la vendemos al exterior, van a entrar divisas. Y si esto no pasa, el productor se funde. El Estado no recibe nada. Por eso propongo que tengamos un cambio positivo. Pensemos cómo hacerlo. Con la carne, por ejemplo, se han cerrado 140 frigoríficos. Hay 16.500 empleados que han perdido su trabajo. Y que ese tipo de trabajos requieren una cierta capacitación, se empieza de abajo y se va ascendiendo. Después son expertos en el manejo del producto para industrializarlo. Lleva un tiempo preparar a esa gente. Perder toda una camada nos atrasa mucho. El Estado no tiene que poner plata.
-Si llega a la Presidencia de la Nación, ¿qué cosas buscaría rápidamente?
-Tenemos que dialogar. Basta de atriles. No sólo los de Casa de Gobierno, sino que también los de la política, de los dirigentes. ¿Por qué no dialogamos? Para encontrar los caminos para enfrentar, por ejemplo, al narcotráfico. Nos unimos para combatir la inseguridad. El diálogo fortalece a la democracia, a las instituciones.
-¿Cómo es ser candidato desde el interior del país? Teniendo en cuenta que los candidatos más fuertes son de Ciudad de Buenos Aires y la Provincia...
-Voy a decir lo obvio: somos todos iguales. Y tenemos el mismo derecho, aunque ellos crean que no. Sé que es más difícil. Siempre a los provincianos nos costó mucho más trabajo. Pero hay cosas, incluso en Olavarría, que terminan siendo marginados, y están mucho más cerca. Hay que luchar por las convicciones. Y vamos a presentar nuestro plan para solucionar los problemas del país.
La sorpresa
En la conferencia de prensa que realizó en medios regionales por la tarde, el precandidato siguió con estos lineamientos y respondió todas las consultas que le realizaron los presentes, tanto periodistas como militantes y ciudadanos que estaban en el Hotel Savoy.
Lo sorpresivo del caso es que no realizó profundas críticas a otros candidatos, ni tampoco al gobierno nacional. Destacó que "hay que buscar ser la real alternativa al actual país" y del kirchnerismo destacó que "es cierto que ganan las elecciones, y tienen mucha mística, militancia y trabajo para conseguir lo que se proponen".
Incluso, entre las políticas que mantendría en caso de ser presidente, destacó algunas "con muchas revisiones", pero hizo especial hincapié en el Procrear: "Es un gran programa para acceder a viviendas".