Con 163 votos a favor, el 20 de noviembre la Cámara de Diputados aprobó la Ley de Talles, que estipula la creación de un registro único y estandarizado de talles, accesible para el consumidor. Sin embargo, todavía no se sabe demasiado respecto a cómo se pondrá en práctica, por lo menos eso es lo que pudo indagar EL POPULAR en una recorrida por distintos comercios de la ciudad.

En la ciudad hay comercios que ofrecen talles especiales o talles reales, pero muchos otros todavía reservan prendas de última moda que encajan con cuerpos que siguen los estereotipos de belleza hegemónicos.

Unos y otros celebran la nueva Ley, pero aseguran que en la pr��ctica no es tan simple porque depende de que la marca y la fábrica comience respetando la norma.

Elegir cómo vestirse, de eso trata la Ley que busca establecer un "Sistema Unico Normalizado de Identificación de Talles de Indumentaria" (Suniti) correspondiente a medidas corporales estandarizadas, y que ya tenía sanción del Senado.

La reglamentación impone que los comercios adopten medidas en la venta de prendas en contra de la discriminación: estarán obligados a exhibir un cartel de 15x21 centímetros, en un lugar visible, que exponga los diferentes talles disponibles. Además, deberán "identificar cada prenda de acuerdo con el Suniti", de manera clara y entendible.

Este sistema apela a la fabricación, confección, comercialización o importación de indumentaria, que sea destinada para todas aquellas personas mayores de 12 años. Cada 10 años, el Poder Ejecutivo deberá realizar un estudio antropométrico de la población para tener actualizada la base de datos.

La ley permitirá que el consumidor se sienta amparado en los diferentes talles y que éstos no sean cambiados. Es decir, "normalizar" los talles y que sean iguales en las distintas marcas.

Poder decidir cómo vestirse

"Está buenísima la Ley y la celebro, pero es difícil de implementar. Qué marca respeta la Ley de talles", apuntó Miriam desde el comercio de ropa ubicado en la esquina de Necochea y Vicente López. Allí hay talles reales que se asocian a marcas como Portsaid o Ver. Para las jovencitas, la marca System también ofrece variedad, colorido y moda hasta el talle XL.

En líneas generales, la nueva normativa busca que cada consumidor pueda decidir cómo y con qué vestirse a partir de talles que tengan relación con los cuerpos reales.

"Acá vienen adolescentes a buscar ropa porque no consiguen en otros negocios. Llegan ya cansadas de tanto buscar e incluso angustiadas. Es realmente una lástima porque son chicas con cuerpos de contextura grande, pero no son obesas y no encuentran qué ponerse", sostuvo.

En el caso de Portsaid, "trae talles desde el 34 al 52" y Ver "desde el 24 al 46". En este sentido, Miriam afirmó que son marcas que siempre han respetado la Ley de Talles. "Son realmente talles reales, no son un invento", dijo.

Desde el local de una reconocida marca ligada a los adolescentes y jóvenes que funciona en General Paz casi Rivadavia, Paola contó que "con las adolescentes vemos ese problema de la ropa. Acá tenemos variedad pero la realidad es que hay tops por ejemplo que no entrarían en un cuerpo de contextura grande. Lo que sí tenemos son remerones que se usan muchísimo y que vienen de todos los talles".

El problema de la escasez de talles también está presente en varios comercios olavarrienses. "Es muy difícil que la marca mande al interior un modelo de todos los talles, mandan lo que más se vende", sostuvo Paola.

En una encuesta realizada entre el 4 de octubre y el 18 de noviembre de 2018 por la ONG Anybody Argentina, fundada por Sharon Haywood, llegó a la conclusión que el 70% de los argentinos tiene dificultad para encontrar ropa de su talle.

De este porcentaje, el 95,10% usa ropa de mujer y el 4,90% usa ropa de hombre, encontrando una dificultad que se presenta principalmente en jeans o pantalones (63,51%). El 79% de los encuestados expresó que encuentran la ropa que desean en talle único siempre (el 36,68%) y frecuentemente (el 42,56%).

Talles reales, talles especiales

Desde el amplio local de Necochea y Rivadavia que ofrece indumentaria para mujer y para hombre, Yesica y Eugenio aseguraron que "las marcas que trabajamos vienen haciendo talles grandes. En pantalones de mujer trabajamos hasta el talle 48 ó 50. Remeras de hombres tenemos hasta el XXL y jeans hasta el 54, lo mismo que bermudas".

Reconocieron que "en general la gente entra mal predispuesta, con el no en la boca, pensando que no hay para ellos y que no van a conseguir nada. Empiezan diciéndote: ‘seguro que no tenés para mí, pero estoy buscando tal prenda’ y finalmente terminan consiguiendo. Se guían por la vidriera pero adentro encuentran talles amplios, a la moda porque siempre la ropa para quienes son gorditos fue negra o aburrida, pero acá traemos ropa colorida y que se usa para todos".

Sobre la Ley de talles dijeron que "súper positiva", pero sostuvieron en que "ojalá que se implemente como se debe y que realmente se cumpla".

La necesidad de contar con una ley de talles surgió hace casi veinte años motivada por las dificultades que enfrentan las personas de todas las edades para encontrar ropa acorde a sus medidas. Desde entonces, asociaciones de consumidores y organizaciones que promueven la diversidad de los cuerpos y la lucha contra los estereotipos alzaron la voz para pedir una legislación a nivel nacional que facilite el cumplimiento de un sistema de talles unificado por parte de la industria.

Sandra, empleada de un comercio céntrico ubicado en Coronel Suárez casi Vicente López, contó a El Popular Medios a horas de sancionada la Ley que llega mucha gente, no solo de Olavarría, sino de otras ciudad a comprar ropa juvenil, colorida en talles grandes; especialidad del negocio.

Además explicó que "las clientas buscan los mismos modelos en talles grandes que los que vienen en talles chicos". Allí trabajan todos los modelos desde el talle 46 al 60, "esa es ropa que no conseguís en otro lugar", expresó Sandra.

Otro aspecto es el de la competencia en el mercado, Sandra afirmó que "son dos o tres fábricas las que tienen talles únicos, y también se abusan de los precios, por ser talles especiales", eso ocurre porque hay un monopolio de la fabricación de talles grandes, "por eso esperamos que con la nueva ley exista equidad en los precios".

Al ser consultada sobre las expectativas de la nueva Ley de talles con medidas corporales reales, Sandra, fue cautelosa y prefirió esperar la reglamentación y luego su aplicación.

Lo cierto es que en marzo de este año el Senado había dado media sanción al proyecto por unanimidad y lo giró a Diputados, donde fue aprobado a fines del mes pasado. El proyecto, ahora ley, propugna por evitar talles que no correspondan con las medidas antropométricas de la población argentina y que no exporte una cultura Extra Small (XS).