Según precisó este viernes Daniel Ottino, actual presidente del CIPO e integrante del consejo directivo de la Federación Industrial Panaderil de la Provincia de Buenos Aires (Fippba), la convocatoria está prevista para el próximo jueves a las 20.30 en instalaciones de la Cámara Empresaria para tratar de consensuar los nuevos precios.

Mientras pereciera existir una tendencia hacia la dolarización de la economía argentina, desde fines del año pasado se experimentó un crecimiento exponencial del precio de la harina, porque esa situación volvió más tentadoras a las exportaciones para los productores y los acopios, al tiempo que también afectó una importante merma del trigo, debido a las condiciones climáticas.

De esa manera, la materia prima del pan, elemento de primera necesidad insustituible en la mesa de los argentinos, experimentó un aumento del 40 por ciento desde el mes de marzo, para estabilizarse en los 700 pesos la bolsa de 50 kilos.

Pero además, debido a la inflación, desde el CIPO aseguran que la mayoría de los costos fijos del sector han sufrido nuevas subas en los últimos tiempos y destacan que además de la harina, en los últimos meses también se registran importantes incrementos en los valores del "combustible, los servicios de luz y gas, los sueldos y aditivos", remarcaron. De acuerdo con los precios acordados por el CIPO en mayo de este año, en el tercer aumento del pan en 2018, en la actualidad el costo de un kilo oscila entre los 55 y 58 pesos, aunque en muchas reventas es posible adquirirlo a precios más bajos.