El advenimiento de la nueva ola de calor fue advertido el viernes 28 de febrero desde el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) mediante uno de sus habituales informes especiales, donde alertó por "persistencia de elevadas temperaturas". El parte apunta a una extensa zona de cobertura que incluye al "noreste de la Patagonia, centro y norte del país". De acuerdo con el informe, estas condiciones se mantendrían "al menos hasta el viernes 6 de marzo, con algunas disminuciones temporarias en el este del área de cobertura".

Así, durante "este período se esperan valores de temperatura mínima entre 20º y 26°, y máximas entre 34º y 40°". En ese contexto, "es de destacar que sobre el este de la provincia de Buenos Aires, incluida la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y el sudeste de Entre Ríos, las temperaturas máximas pueden verse atenuadas por el efecto del viento del sector este y los fenómenos de brisa, esperándose valores entre 32º y 35°".

Para esta semana, las perspectivas agroclimáticas dadas a conocer por la Bolsa de Cereales indican que "retornarán los vientos del trópico, causando un marcado ascenso térmico, con registros elevados en la mayor parte del área agrícola". De esa manera, "el centro del NOA, el centro y el nordeste de Cuyo, el noroeste de Córdoba, el este y el sur de la Provincia de Buenos Aires, el oeste de La Pampa, el sudeste del Uruguay y el sudeste del Paraguay observarán temperaturas máximas entre 30º y 35°".

Estas condiciones incidirían para la llegada de lluvias que serían esquivas en la ciudad. Se estima que "paralelamente, se producirá el paso de un frente con escasa actividad, que sólo producirá precipitaciones moderadas sobre el oeste y el sur del área agrícola, mientras que gran parte de su extensión recibirá aportes escasos". Por eso no sería extraño que "la mayor parte del NOA, la mayor parte de Cuyo y la mayor parte de la Región Pampeana observarán precipitaciones moderadas a abundantes (10 a 50 mm)". Mientras que "el centro del NOA, el centro y el sudoeste de Cuyo, el sudoeste de Entre Ríos, gran parte de Córdoba, el este de Buenos Aires y el sur de La Pampa, registrarán precipitaciones escasas (menos de 10 mm)".

La mayoría de los servicios dedicados a la predicción del clima indican que en el comienzo de marzo impera "una destacada situación de estabilidad que persistirá por varios días sobre buena parte de la Argentina. Un sistema de cuña (altas presiones) en niveles medios y altos de la troposfera será el encargado de estancarse y bloquear la normal circulación atmosférica que presentan estas latitudes medias". Por ese motivo, "si bien no se esperan registros térmicos extraordinarios generalizados, será destacada la cantidad de días que las temperaturas permanecerán más altas que lo habitual".