Manuel Adorni, vocero presidencial, informó en redes sociales que el Gobierno Nacional, por decisión del presidente Javier Milei, decretó siete días de duelo tras el fallecimiento del papa Francisco. “Falleció el Papa Francisco, Jorge Bergoglio. Líder espiritual y guía de millones de hombres y mujeres. El Presidente de la Nación decretará siete días de duelo por el fallecimiento del Santo Padre. Q.E.P.D.”, publicó en su cuenta de X (ex Twitter).

Durante el período de duelo, que se extenderá hasta el lunes 28 de abril, la bandera nacional permanecerá a media asta en todos los edificios públicos, y se suspenderán los actos oficiales. Más temprano, la Oficina del Presidente había confirmado la muerte de Jorge Mario Bergoglio, el primer pontífice argentino y latinoamericano: “La Oficina del Presidente lamenta el fallecimiento del Papa Francisco, Jorge Mario Bergoglio, quien se convirtió en el año 2013 en el primer argentino en llegar a liderar la Iglesia Católica y conducirla con entrega y amor desde el Vaticano”.

El comunicado oficial expresó además: “La República Argentina, un país de larga tradición católica y tierra del Papa Francisco, lamenta profundamente la partida de Su Santidad y le envía sus condolencias a la familia Bergoglio. El Presidente de la Nación acompaña en este triste momento a todos aquellos que profesan la fe católica y que encontraron en el Sumo Pontífice un líder espiritual”.

Y concluye destacando su legado: “El Presidente Javier Milei destaca la incansable lucha del Papado de Francisco para proteger la vida desde la concepción, promover el diálogo interreligioso y acercar la vida espiritual y virtuosa a los más jóvenes. Además, pone en valor su voluntad de llevar austeridad a la Santa Sede con sus gestos pastorales. Requiem aeternam dona ei Domine. Et lux perpetua luceat ei. Requiescat in pace”.

El Vaticano comunicó el fallecimiento del papa Francisco a los 88 años a través de su canal oficial en Telegram. Su deceso ocurrió un día después de su última aparición pública, desde el balcón de la basílica de San Pedro, durante la celebración de Pascua. Allí, ante 35.000 fieles, pronunció un fuerte mensaje: “No puede haber paz sin libertad de religión, libertad de pensamiento, libertad de expresión y respeto por las opiniones de los demás”.

El Papa había sido dado de alta recientemente tras una grave neumonía que lo tuvo internado 38 días, y según fuentes vaticanas, atravesó dos episodios críticos de salud durante el último año. Mientras tanto, en la Catedral Metropolitana de Buenos Aires se realiza una misa en su honor, presidida por el arzobispo Jorge García Cuerva, quien afirmó: “El mejor homenaje que podemos hacer a Francisco es unirnos y dejar de enfrentarnos todo el tiempo”.

En su última entrevista con Infobae, Francisco habló sin temor sobre la muerte: “Sé que va a venir. Alguna vez que me pareció que podía haber riesgo me preparé, cuando tuve que hacer la operación que era riesgosa. Pero le pedí al Señor que no me agarre inconsciente, eso no. Que al menos la vea venir. Dicen que es raro que exista el miedo a la muerte: el miedo es a verla venir. Así que verla venir, para saber el fin”.