La comisión organizadora -que ha tenido mucho trabajo, pero sobrellevó la situación y salió airosa sin problemas-, que tuvo la salida de una de las dirigentes que era un poco la líder pero que por problemas internos dio un paso al costado, supo disimular e inclusive mejoró en varios aspectos y detalles de la coordinación de todo lo previsto en materia artística, así como la llegada de los "tres reyes llegados desde Oriente".

Claro que todo se va atrasando un poco porque además de entregar regalos también los padres quieren hacer las fotos de los reyes con sus hijos, y Melchor, Gaspar y Baltasar entregaron un promedio de 320 cada uno, con la ayuda de los eficientes pajes, por lo que los fuegos artificiales comenzaron a verse mientras los reyes "hacían su trabajo", para darle lugar en el escenario natural a la cantante folclórica Sonia Vega, quien llegó desde Chivilcoy -donde se encuentra radicada- y no solamente accedió a bajar un poco su cachet, sino que también trajo regalos para ser distribuidos entre los chicos. Un ejemplo de solidaridad, sin dudas, lo que refleja claramente su don de gentes, para brindar un hermoso show de poco más de una hora -aunque ya la gente había comenzado a retirarse debido al frío- acompañada por una pareja de baile olavarriense, integrada por Nancy Campillo y Oscar Gómez.

Durante tres días en la parroquia Cristo Rey e inclusive hasta último momento casi a un costado del escenario, Rosa Zito y Verónica Ruybal (la organizadora todoterreno, que recibía regalos, coordinaba y también sacaba fotos) estuvieron recibiendo los presentes que un rato más tarde irían a manos de los chicos. Todos pusieron el hombro, e inclusive el escribano Matías Castro también dio su apoyo y colaboró para fiscalizar los dos sorteos: una Motomel 150cc (número 0123) y un LED Telefunken 24" (número 1340), cuyos ganadores fueron Osvaldo Oscar Fernández (domicilio en avenida Sarmiento 3718) y Raúl Donegana (domiciliado en Sierras Bayas), respectivamente, de una rifa para apoyar a la comisión de fiestas que trabajó mucho para vender nada menos que 2 mil números. Los felices poseedores tienen ahora 30 días para retirar los premios, debiendo concurrir a Casa Silvia, sucursal Sierras Bayas, previo contacto con algún miembro de la comisión organizadora.

Los que sorprendieron, y para bien, fueron los chicos de la compañía "Astrolabio", que llegó desde Saladillo para exponer un espectáculo circense, con mucho humor, gimnástico y acrobacias en telas que conjugaron de manera maravillosa, mientras que siete pibes sierrabayenses se sumaron al programa y colaboraron para poner música mientras llegaban los reyes, que detrás del escenario se sacaron muchas fotos.

Así pasó otra gran fiesta de los Reyes Magos. Aquella gran idea que comenzó tímidamente organizada desde la parroquia hace 52 años, en aquel momento por el padre Julio Vicente, quien -según dicen- trajo la idea desde España, con pesebre viviente incluido, y en aquellos tiempos Melchor, Gaspar y Baltasar bajaban (por la misma calle que lo hacen actualmente), daban una vuelta a la plaza de la localidad y allí entregaban los regalos.

Después llegó Enrique Violino, pero cuentan que el que le cambió el rumbo y le dio éxito a la fiesta fue el padre Juan Carlos Naviliat, hace ya unos 20 años, para ir transformándose en una espectacular fiesta que hizo famosa a Sierras Bayas, localidad a la que se nombra en distintos rincones del país gracias a esta tradicional celebración. También estuvo en los últimos años Argentino Lauría y actualmente el padre que trabaja en la fiesta desde la parroquia es Juan Alberto Ceverio, aunque -claro está- con un nutrido grupo de colaboradores que son los que trabajan intensamente durante un año para que en la noche del 5 de enero los chicos (y también los grandes, por qué no) sean felices y mantengan viva esa hermosa ilusión de recibir el regalo de manos de Melchor, Gaspar y Baltasar.