Estufas Lepen, una empresa que nació en Olavarría y que empieza a abrirse al mundo
Comenzó su producción en 2004 y su crecimiento fue sostenido. Hoy traspasó las fronteras de Olavarría y llega a la zona, al resto del país y empieza a incursionar en países limítrofes. Las estufas Lepen son sinónimo de calidad y prestigio, con un diseño propio que las hace diferentes.
Carlos Laregnée, propietario de la firma que tiene sede en el Parque Industrial de Olavarría y sus oficinas comerciales en avenida Del Valle casi España, contó a El Popular la historia de su firma y recordó cuando "empezamos en medio garaje con una producción de dos estufas al mes". Era el año 2004, pero él traía la experiencia y el conocimiento adquirido en Canadá en los ´90, que le sirvieron para lanzarse a un mercado novedoso y con muchas posibilidades de crecimiento.
"En ese momento la gente no sabía lo que era una estufa del bajo consumo y alto rendimiento. Era difícil introducir en el mercado un producto nuevo que no había referencia en la que confiar. De a poco nos fuimos haciendo conocer. Empezamos con algo de publicidad en el diario y luego empezó a llegar la gente de Olavarría y a vender en la zona. Pusimos un representante en Bolívar y fuimos sumando y hoy tenemos casi 200 representantes".
Las estufas a leña Lepen son una idea netamente olavarriense, sin copia de ninguna otra y, al mismo tiempo, convirtiéndose en modelo de otras firmas. "A la gente le empezó a gustar tener el fuego en la casa y comenzaron a conocer los beneficios. Es un calor diferente, es sano porque es seco, quita la humedad a la casa, por supuesto que no tiene olor porque tiene un cierre hermético. Se puede ver la llama porque cuenta con vidrio y un sistema de doble cámara y pulmón que vino para revolucionar el mercado".
Las exigencias del mercado los obligaron a instalarse en el PIO, donde creció notablemente la producción y hoy se fabrican unas 1.800 estufas al mes. Al mismo tiempo, Lepen cuenta con unos 100 empleados abocados a distintas áreas de la empresa. "Hoy estamos en todo el país, sobre todo en lugares fríos, y capitales de provincias: llegamos a Neuquén, Córdoba, San Luis, entre otros lugares", ya sea casas de familia como comercios, hosterías o campings.
Internet permitió ampliar el mercado y por eso actualmente "tenemos un 33% de venta por representantes, un 33% a través de Mercado Libre y el resto lo vendemos acá nosotros, a través de redes sociales y gente que viene. Se va conociendo cada vez más, y yo siempre digo que cada estufa hace vender dos más", relató Carlos Laregnée.
Para todas las necesidades
Al contar con una amplia variedad (36 modelos diferentes) "no puede haber un cliente que no quede satisfecho o no encuentre el modelo para su necesidad. Tenemos tres modelos de rinconeros, el más grande con horno y salida de calefacción central, siete modelos casete para insertar en hogares, cocinas a leña, termotanque para calentar el agua en el caso de uso familiar. Hacemos calderas a pedido y a medida para campings y hosterías. Y también estufas con medidas convencionales para cualquier lugar de la casa y estufas con hornos de distintos tamaños, casete con horno y las estufas centrales que sirven para dividir dos ambientes, con vidrio para ambos lados que permite ver la llama de los dos ambientes. Los modelos los innovamos nosotros", dijo con orgullo el presidente de la firma, también titular del PIO.
La novedad es "una estufa única en el país automática a pelet y única en el mundo a pelet y leña al mismo tiempo". El pelet es un producto totalmente natural, catalogado como biomasa sólida, formado por cilindros muy pequeños, de unos pocos milímetros de diámetro. Se trata del material de descarte de las cosechas (maíz por ejemplo) que se prensa y se convierte en combustible pequeño. "La estufa tiene una tolva doble carga, de ocho horas de duración y la estufa va automáticamente alimentando la cámara de combustión y la va cargando para alimentar la llama. Esto permite mayor durabilidad del calor y es el futuro, ya está en Europa y en Chile y el pelet se utiliza también en los hornos de las fábricas. Es algo que va a andar muy bien". A esto se suma la estufa con sistema de llama invertida, que estará en el mercado el año próximo, con mejores efectos sobre el ambiente.
"Siempre tenemos lo que el cliente necesita y si hay alguien que pide una estufa a medida o algo especial, estamos para complacer, sobre todo en esta época del año".
Una de las características del trabajo en Lepen es la actividad familiar. Carlos Laregnée trabaja junto a su esposa y varios miembros de su familia, una realidad que en nuestro caso "suma mucho. Estamos en la oficina, en la venta, en la producción en el taller. En el caso nuestro es muy bueno trabajar en familia".
Ahora "estamos incursionando en logística propia. Llevamos camiones completos a distintos puntos del país y hacemos nuestra propia logística" a lo que se suma la realización de servicios industriales a fábricas locales y de la zona. "Buscamos brindarles servicios a empresas que necesiten de metalmecánica y somos la única empresa que tiene un cupo tan alto de consumo de metal que le compramos a Siderar, del grupo Techint".
Carlos Laregnée repasa su propia historia y asegura que "tenía esperanza y confianza" de que el mercado le daría una respuesta positiva. "Pero nunca soñé que íbamos a llegar tan lejos. No pensé que iba a tomar la magnitud que tomó. Porque cuando te tenés que arreglar con dos estufas al mes es duro. Esto llevó su tiempo hasta que se fue multiplicando, pero una vez que empezó no lo pudimos parar". Hoy siguen produciendo tanto verano como invierno, para poder abastecer la demanda que es cada vez mayor. "Por precio, por calidad y por variedad, somos líderes en nuestro rubro". Y desde el invierno 2016 pasaron a ser los número 1 en el mercado de estufas a leña.