Patrimonio Cultural: "La ciudad pierde su memoria"
Un grupo de olavarrienses está impulsando la conformación del grupo Patrimonio Histórico de Olavarría para preservar los bienes tangibles e intangibles que guardan la memoria de los orígenes de la ciudad. Los arquitectos Angelo Vellucci -desde Italia- y Oscar Luna expresaron que no hay voluntad política de salvaguardar la historia.
Desde ese momento, artistas, arquitectos, ingenieros y vecinos de la ciudad se pusieron en contacto para formar un grupo que intente rescatar los edificios que aún quedan en pie, aunque a veces parezca que en muchos casos, ya sea tarde.
Por este motivo, el arquitecto Angelo Vellucci -quien es olavarriense pero vive en Italia desde hace 30 años- creó una página en la red social y quienes se sumaron a la misma eligieron posibles miembros para encabezar el grupo y comenzar a trabajar.
Cómo conservar
Los países del Primer Mundo mantienen su turismo gracias a la conservación del patrimonio arquitectónico que, traducido en años, incluye a las obras con más de cincuenta años de existencia. Es el caso de Italia, por ejemplo, donde hay profesionales que atentos a las leyes vigentes trabajan en su restauración, si es que lo necesitan.
Angelo explicó en Mejor de Mañana (FM 98pop) que "en otros países hay más conciencia de la defensa del patrimonio. Sólo se aprueban los proyectos si cumplen con las leyes y los gobiernos ejercen un control supremo".
El hecho de la conservación, además, no tiene que ver específicamente con un costo que se genere al Municipio, en el caso de Olavarría. Sino que se trata de ver una proyección más arraigada a lo cultural y no tanto a lo comercial como muchas veces sucede: se derrumba un pedazo de historia para levantar un comercio.
Banco Edificadora
El arquitecto de nuestra ciudad Oscar Luna, quien ha integrado el grupo PAO (Patrimonio Arquitectónico Olavarría), explicó que no habría grandes perjuicios en los edificios de la ciudad si hubiese una legislación clara al respecto y un claro compromiso del cuerpo ejecutivo.
"Lo que se está haciendo en el ex Banco Edificadora, si existiera una ordenanza y restricciones como tiene cualquier lote, se podría haber evitado. Porque los edificios también deben tener vida, no son cosas estáticas, pero los usos se pueden modificar compartiendo la esencia del edificio".
Además, respecto a la versión que circulaba respecto de que allí podrían trasladarse oficinas del Municipio, dijo que "era factible y casi necesario. Obviamente ellos no pueden comprar todos los edificios de valor patrimonial pero se podría haber hecho lo que se hizo con el Correo".
Estos espacios al igual que la parroquia San José o el Centro Cultural Hogar de Niñas San José son únicos porque cuentan con un trabajo de albañilería artesanal casi irrepetible hoy cuando ya casi no existe mano de obra calificada para este tipo de labores.
Para finalizar, lo que Luna celebra es que con el tiempo hay mayor cantidad de ciudadanos que se ven preocupados y se movilizan por este tema. Entiende que, de todos modos, es responsabilidad del Estado brindar información a los propietarios de espacios añejos para que sepan que además de estar adquiriendo un espacio propio para el destino que fuere, están habitando un lugar que se considera una obra de arte.