El detenido es Enzo Nahuel Del Pino, quien fue alojado el miércoles último en una celda de la Unidad Penal Nº 2 del Complejo Penitenciario de Sierra Chica. El joven de 23 años fue capturado el 27 de octubre en un allanamiento que se realizó en el barrio Sarmiento Norte, y desde ese momento permanecía en la comisaría Primera, dependencia cuyos calabozos están clausurados desde hace muchísimos años.

Del Pino fue detenido tras una rápida investigación tres días después de que agrediera con un arma blanca a Matías Ponce, de 24 años. El ataque sucedió alrededor de las 22 del 24 de octubre en la vía pública, en Chacabuco y Juan XXIII, en medio de una confrontación en la que participaron varias personas. Cuando Del Pino fue detenido se refirió que hasta ese entonces había mantenido un vínculo de amistad con la víctima.

En esta pelea Ponce recibió dos puñaladas, una en la zona torácica y la restante en la pelvis, por lo que al día siguiente de su internación fue sometido a una cirugía. Si bien en los primeros días se refirió que el joven corría riesgo de vida, por lo que permanecía internado en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Municipal "Dr. Héctor Cura", con el pasar de las jornadas su evolución fue favorable.

El agresor fue capturado en una vivienda ubicada en Cerrito entre Lebensohn y Juan XXIII, a dos cuadras de donde sucedió la confrontación. En ese momento esa vivienda además fue allanada con el propósito de secuestrar el cuchillo con el que hirió de gravedad a Ponce.

Del Pino fue imputado por la fiscal Viviana Beytía, titular de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 10 de nuestra ciudad, por el delito de "homicidio en grado de tentativa", figura que fue confirmada por el juez Carlos Villamarín tanto en la instancia de detención como al momento de la prisión preventiva, medida que se dictó a fines del mes pasado.

El Juzgado de Garantías Nº 2 de Olavarría determinó la liberación de dos hombres que fueron imputados por tentativas de homicidio, por casos sucedieron en los últimos días del mes pasado. En los dos episodios las víctimas de los ataques se recuperaron favorablemente y, a pesar de las carátulas determinadas por los fiscales intervinientes, el juez Villamarín bajó el encuadre penal de las dos causas a "lesiones graves".

El primero de los casos ocurrió en la tarde del 19 de noviembre, cuando Agustín Santellán, de 19 años, fue baleado en el cruce de calle 13 y Grimaldi, en el barrio Lourdes. Se presume que el agresor, Bandon Nahuel Contreras, habría gatillado varias veces, y uno de esos disparos hirió la vena femoral de una de las piernas de la víctima, lo que le provocó graves heridas.

Contreras fue detenido pocos días después en un domicilio de calle 11 bis al 4300, y el fiscal Christian Urlézaga lo imputó por el delito de "homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa" en concurso real con "portación de arma de fuego sin la debida autorización".

El otro de los casos ocurrió en la tarde del 28 de noviembre, cuando Juan Pablo Díaz, de 30 años, hirió a Alejandro José Fernández con el mango de un cepillo para limpiar vidrios. La agresión ocurrió en la vía pública, en avenida Pringles e Hipólito Yrigoyen, y Fernández fue internado en estado grave.

En esta causa la fiscal Viviana Beytía encuadró los hechos como "tentativa de homicidio", y el juez Carlos Villamarín aceptó el pedido de detención de Díaz.

Sin embargo, distintas fuentes consultadas por este Diario refirieron que una serie de situaciones que se asemejan en ambas causas llevaron a que el titular del Juzgado de Garantías Nº 2 dispusiera la liberación de los agresores. Estas medidas se concretaron pocos días después de que fueran detenidos, tras los pedidos de las defensas de ambos imputados.

En este sentido se señaló, principalmente, que en ambas causas el juez Villamarín bajó la carátula de tentativa de homicidio a lesiones graves, algo que no es menor si se tiene en cuenta el reproche penal para cada uno de los delitos. En tanto que se mencionó además que en ambos casos las víctimas, que se recuperaron de manera favorable, habrían desistido de que se avance con el proceso judicial contra los agresores, que seguirán el proceso en libertad.